Voy a zumbar este gallo
en medio de la gallera
óyeme bien,
en medio de la gallera,
pa' ver si existe otro gallo
que quiera medirse y pueda.
Verdad mi hermano,
que quiera medirse y pueda.
Cuando me pongo a cantar
no pido permiso a nadie.
Cuando me ponga a cantar
no pido permoso a nadie,
que eso de pedir permiso
es cuando el hombre es cobarde.
Verdad Carrero,
es cuando el hombre es cobarde.
Soy palo que no me cimbro,
que no me cimbro,
barco que no me volteo,
cuando a mi me da la gana
toco el cielo que no veo.
Verdad Eduardo,
toco el cielo que no veo.
Recuerdo cuando en oriente
brilló el astro diamantino.
Recuerdo cuando en oriente
brilló el astro diamantino,
con su rayo cristalino
alumbrando el reluciente.
Verdad Carrero,
alumbrando el reluciente.
Para que soñar despiertos?
Soñar despiertos con horizonte de luz
si una tumba y una cruz,
oye mi hermano,
es la herencia de todo muerto.
Mas allá de no sé dónde,
de no sé dónde,
mataron a no sé quién
y si no corro tan duro
me matan a mí también.
Verdad Eduardo,
me matan a mi también.
El que bebe agua en tapara
y se casa en tierra ajena...
verdad mi vida
y se casa en tierra ajena,
no sabe si el agua es clara
o si la mujer es buena
verdad Carrero,
y si la mujer es buena.
Todos creen que el cantar,
ahí el cantar es nomas abrir la boca,
y el cantar tiene sentido
y saber cuándo le toca,
óigalo bien,
y saber cuándo le toca.
A mí me gusta cantar
donde cantadores cantan,
y que sepan declarar
el eco de su garganta.
Que sepan declarar
el eco de su garganta,
verdad Eduardo,
el eco de su garganta.
Cantando el zumba que zumba,
zumba que zumba
fue que yo me enamoré,
yo voy a seguir cantando
verdad mi vida,
pa' enamorarme otra vez.