Elegida del sol, rocío del cielo,
Zisary Lucero, renombrada por los dioses.
Florecita de la tierra, llevas mi sangre,
llevarás mi nombre hasta el día de la muerte.
Desde el amanecer hasta el atardecer,
tú hilas las tristezas y con ellas tejes alegrías.
Desde el amanecer hasta el atardecer,
tus manitas tiernas siembran el maíz,
el corazón de la tierra que acabara con el hambre.