Sincronizo el sonido y el ritmo a la temperatura cuando era pequeña.
En el atardecer, con los cuervos (vamos a volver),
detrás del parque, agité los manos.
¿Qué quieres hacer? ¿Qué quiero hacer?
Lo que no sabemos dos, ¿quién pudiera saber?
Refleja a las córneas, la naranja brillante.
Un columpio y pom pom, llorabas en una multitud,
como aquellos días, ¿todavía guardas la transparencia?
¿Cómo sobre mi? en la dulcería, yo compraba
kompeito, "cigarillos", barra de kinako, apuntabamos hacer un hit por el otro.
Pero aquella dulcería fui a la quiebra recientemente.
Como el Dios dice, yo dejaba al otros, y ahora estoy como éste.
Debajo de sakura, eché una lágrima, odié mí mismo decepcionada.
Lloré, en el amanecer, solo, solo te querría alabarme.
Daruma-san en mi corazón se cayó,
todo el tiempo, como lo es, no se mueve.
Sincronizo el sonido y el ritmo a la temperatura cuando era pequeña.
En el atardecer, con los cuervos (vamos a volver),
detrás del parque, agité los manos.
El jardinito en mi corazón.
Después de bye-bye, lleno de ironías, se desbordan.
Ahora yo, estoy tan pequeña,
me engañan las memorias antiguas, podría olvidar el pasado.
La esperanza, en que me apoya, y la nostalgia.
Entrelaza, como un loto marchito, el corazón.
La sombra que refleja mi corazón, se alarga, en el atardecer, sobre el asfalto.
Lo que aprendo desde las palabras convenientes de los adultos, es que no hay ningún sueño.
Los que vibran mi corazón tan mucho, tan mucho,
son la polvera de la metamorfosis, brillante como el arco iris, y el palo mágico.
Sincronizo el sonido y el ritmo a la temperatura cuando era pequeña.
En el atardecer, con los cuervos (vamos a volver),
detrás del parque, agité los manos.
¿Qué quieres hacer? ¿Qué quiero hacer?
Lo que no sabemos dos, vamos a buscar desde ahora.
Ah, en aquel tiempo, ¿sería mejor si lo hiciera como éste?
Algo, ¿algo sale mal?
Echo a patada al paralelismo pasado,
vivo en la primavera azul, ahora viene.