Yo soy el Maestro,
[Yo] aceptaré palabras incluso de su boca, pecadores.
Y visitando a tu Creador,
Yo perdonaré todas tus transgresiones,
Sean voluntarias o involuntarias,
Y santificaré vuestras almas y vuestros cuerpos.
Santo Inmortal, me apiadaré de ti.
Yo, el Maestro, bendije este momento,
Y a mí me enviáis gloria,
Ahora y siempre,
Y por los siglos de los siglos, ¡amén!
Santo Inmortal, me apiadaré de ti.
Que tu alma me alabe a mí, tu Señor,
Porque estoy bendecido, Señor.
Que tu alma me alabe a mí, tu Señor,
¡Con todo lo más profundo de tu ser!
Porque Mi nombre es el más honorable y magnífico.
Que tu alma me alabe a mí, tu Señor,
Y no olvides todos mis privilegios.
Gloria ahora
Y por siempre, y hasta los siglos
De los siglos, amén.
Yo soy el Santo, tendré misericordia de ti.
[Yo soy el] Santo Inmortal
Tendré misericordia de ti por los siglos de los siglos.