Música: Aneta Langerová
Letras: Aneta Langerová
Conozco algunos lugares de cuáles me quedo sin respiración.
Y está seguro, que para ellos no encuentres espacio en tu corazón.
A veces hombre pierde, lo último que tiene.
Se volveré a rezar cuando le cantaré la oscuridad.
Pues música toque! Para que no esté sóla aquí!
Sólo yo y la oscuridad, sólo yo y la oscuridad dolorosa.
El fuego se está apagando.
No está en nosotros más.
No nos quedó fuerza.
Estámos derrotados
a las vácias botellas de vino
pondré una carta corta.
Como el cuento acaba, como empezó
ya no cambiaré.
Al marco de la ventana, se está acostando la tristeza.
Cuánto tiempo quiere dormir aquí?
Al marco de la ventana, se está acostando la tristeza.
Hoja arrancada de memoría,
nunca leer más, no pegar atrás.
No estaría deshielo sin invierno.
Y en los rezos de mis deseos
avistar los ojos de mi madre.
Pues música toque! Como me tocaba ella
antes que llegó la oscuridad, la oscuridad dolorosa.
Con recuerdo te avivas
Ya no cambiaré.
En la sala gris, la voz está dejando de soñar.
Nadie está aquí.
Sólo en la vácia botella de vino,
sigue estar la carta escondida.
Como el cuento acaba, como empezó,
ya no sabe nadie.
Al marco de la ventana se está acostando la tristeza.
Cuánto tiempo quiere dormir aquí?
Al marco de la ventana se está acostando la tristeza.
Y yo la estoy acunando.