Si el vino viene, viene la vida,
Si el vino viene, viene la vida,
vengo a tu viña, tierra querida
vengo a tu viña, tierra querida
Quiero morirme cantando,
bajo tu parra madura
y que me entierren al alba,
rega'o de vino mi tumba,
rega'o de vino mi tumba,
Si el vino viene, viene la vida
Si el vino viene, viene la vida,
vengo a tu viña, tierra querida
vengo a tu viña, tierra querida
Quisiera dejar mis huesos,
bajo cielo mendocino,
que mi sangre y mi cenizas,
vuelvan camino del vino
Qué triste ha de ser morir, y no volver nunca más,
pero es tán linda la vida, pero es tan duro el camino
que si me muero algún día, entiérrenme en Mendoza,
en San Juán, allá en La Rioja, en Cafayate la hermosa,
que en vino habré de volver.
Y cuando lloren las parras, para que rían los hombres,
habré de llenar las copas, y habré de besar las bocas
de mis viejos compañeros, o tal vez, de la que quiero
y no me pudo querer.
Y en una noche de farra cuando lleven la guitarra,
si ven al vino llorar, déjenlo llorar su pena,
déjenlo llorar su pena, que en la lágrima morena
como nunca ha de gritar:
La vida es un vino amargo,
dulce, en jarra compartida,
que aquel que nada pa' adentro,
se ahoga solito en la vida.
Si el vino viene, viene la vida,
Si el vino viene, viene la vida,
vengo a tu viña, tierra querida
vengo a tu viña, tierra querida
Tierra querida, tierra querida
Déjenlo llorar su pena,
que en la lágrima morena
como nunca ha de gritar