Cuando el amor llega así,
de esta manera,
¡uno no se da ni cuenta!
El crutal reverdece
y el guamachito florece
y la soga se revienta...
Caballo, le dan sabana
porque está viejo y cansado,
pero no se dan de cuenta
que, un corazón amarrado,
cuando le sueltan las riendas,
¡es caballo desbocado!
Y, si una potra alazana
caballo viejo se encuentra,
el pecho se le desgrana
y no le hace caso a falseta;
y no lo obedece a freno,
ni lo paran falsas riendas...
Cuando el amor, llega así,
de esa manera,
¡uno no tiene la culpa!
Quererse no tiene horarios,
ni fecha en el calendario
cuando las ganas se juntan...
Caballo, le dan sabana
y tiene el tiempo contado,
y se va por la mañana
con su pasito apurado,
a verse con su potranca,
que lo tiene embarrascado.
El potro da tiempo al tiempo,
porque le sobra la edad...
Caballo viejo no puede
perder la flor que le dan
porque, después de esta vida,
¡no hay otra oportunidad!