Vamos angélicas tropas, vamos, vamos a marchar,
A seguir a nuestro Rey, a la Patria Celestial.
Cual es nuestro general, que a las tinieblas da luz,
El que cargo por nosotros, el madero de la cruz.
Vámonos a la batalla, oficiales de Jesús,
Vamos cargando el madero, de nuestro Padre Jesús.
Nuestra patria no es aquí, de aquí estamos desterrados,
Nuestra bandera es la gloria, y de Dios somos soldados.
Ven ejército amoroso, vamos a marchar veloz,
Hasta ingresar nuestras filas, en las banderas de Dios.
Esta es la mejor batalla, para que el hombre este listo,
Someterse a las banderas, del ejército de Jesucristo.
Esta es la famosa guerra, donde yo vine a entregarme,
A pelear con el enemigo, que es demonio, mundo y carne.
Vamos humildes soldados, vamos a hacer ejercicio,
Para que en el día del juicio, estemos bien preparados.
Cual soldados valerosos, de la iglesia militante,
Vamos a cantar victoria, a nuestra iglesia triunfante.
En la ciudad de la gloria, nos reuniremos con gozo,
Cantando a Dios alabanzas, llenos de alegría y gozo.
Esta es la escuela de Cristo, entrenando en alta voz,
Vamos siguiendo los pasos, todos en gracia de Dios.
Bendito sea un Dios de amor, bendito sea nuestro Rey,
Que le regala su gloria, a quien respeta su ley.
Amor Jesús prodigioso, tú eres mi mayor tesoro,
El único bien que adoro, en este mundo engañoso.