Tras de mí,
una escena y diez mil
frases que repetir.
Y ya ves, lo que es no es.
Yo no voy a contar lo mejor,
a ocultar lo peor;
me pongo el mejor chaqué.
No digo lo que digo,
hago lo que no hago.
¡Al revés! ¡Al revés!
Porque ser valiente
no es sólo cuestión de suerte.
A veces no soy yo,
busco un disfraz mejor,
bailando hasta el apagón.
¡Disculpad mi osadía!
Tú también tienes que ver
que nunca tengo mi papel.
Nube gris: riega todo el jardín,
todo el jardín, todas las flores
que no probé.
No olvido los sueños,
vuelvo a lo que no acabó.
¡No perdí! ¡No perdí!
Porque ser valiente
no es sólo cuestión de verte.
A veces no soy yo,
busco un disfraz mejor,
bailando hasta el apagón.
¡Disculpad mi osadía!
Pensad que ya no estoy,
que el eco no es mi voz.
Mejor aplaude y vámonos.
¡Que termine esta función!
Tras de mí,
una escena y diez mil
frases que repetir.
Y ya ves, lo que es no es.
A veces no soy yo,
busco un disfraz mejor,
bailando hasta el apagón.
¡Disculpad mi osadía!
Pensad que ya no estoy,
que el eco no es mi voz.
Mejor aplaude y vámonos.
¡Que termine esta función!
¡Deme la voz!
¡Deme la voz!
¡Deme la voz!
¡Apuntador, deme la voz!
¡Deme la voz!
¡Apuntador, deme la voz!
¡Deme la voz!
¡Deme la voz!
¡Deme la voz!
¡La voz!