Y no pienses que luego todo lo que nos ocurre
es sólo un plato de espinas.
Pero tú sabes qué es, tú sabes cómo es
acercarse al confín.
Será más fácil quedarnos los dos despiertos.
¿Qué esperas del sol?
Tú nunca hablas, mas lo que quieres
es sólo un día normal.
Tú enseñas el silenci
en todas los idiomas del mundo.
Yo escribo de amor
pero luego me escondo.
Me has visto correr en la lluvia,
perseguir a un diario en la playa,
una reconjunción, mi absolución.
Esto eres para mí, uh.
Esto eres para mí, uh, uh.
Lo que tú eres para mí.
Lo que tú eres para mí.
Me has visto gordo, tocar el fondo.
Has visto todas las cosas de las que me avuergüenzo.
Has fingido no ver
cuando traicionaba, jugaba y engañaba.
Mas yo sé por qué; sí, sé por qué
todavía ahora apretamos los puños
y no nos marchamos de aquí.
Conoces a todos los que amo,
su vida y la mía.
A algunos los has visto llegar,
a otros marcharse.
Ya no hay besos bajo el portón.
Ya no está el éxtasis del primer día.
Es una mano sobre los ojos antes del sueño.
Esto eres para mí.
Esto eres para mí.
Lo que tú eres para mí.
Lo que tú eres para mí.
Esto eres para mí.