Qué quiere decir ser
de metro y medio de estatura,
te lo dicen los ojos
y las bromitas de la gente,
o la curiosidad de una muchacha irreverente
que se te acerca sólo
por una duda impertinente:
quiere saber si es cierto
lo que se dice de los enanos,
que son los más dotados
de una virtud poco aparente,
una de las virtudes más indecentes.
Pasan años y meses,
y si los cuentas hasta minutos,
es triste llegar a adultos
siendo siempre diminutos;
y la calumnia sigue,
con una voz que resuena duro,
diciendo que el enano
es una mierda de seguro,
pues tiene el corazón
muy cerca del hueco del culo.
Fueron noches de insomnio
velando a la luz del rencor
en que trabajando duro,
llegué al fin a procurador.
Pa' recorrer la calle
que de los bancos de una catedral,
lleva a la sacristía
y hasta la cátedra de un tribunal;
soy un juez, finalmente,
árbitro en tierra del bien y del mal.
Y entonces de mi estatura,
nunca más, nadie se reiría;
menos quien en la corte
me llamaba "Su Señoría".
Haberlo condenado
fue para mí un gran placer,
antes de despedirlo
cuando no habría de volver.
Nunca la estatura
de Dios supo conocer.