No tenemos en el corazón a quien amar por siempre,
y derramamos lágrimas por querer amar demasiado.
Pensamos que somos sinceros, creemos haber encontrado el único ser en la tierra que no podemos remplazar,
no tenemos en el corazón a quien amar por siempre,
y derramamos lágrimas por querer amar demasiado,
un día te despiertas, ya no se despierta el rayo de sol que nos adornaba.
Lamentamos el tiempo en el cuál podíamos amarnos,
lamentamos el tiempo donde el corazón estaba envuelto.
Solo nos quedan los recuerdos
Pobres recuerdos que intentamos retener.
Pero yo, tengo en el corazón a quien amar por siempre.
Siempre tendré suficientes lágrimas para llorar.
Siempre tendré suficientes risas que borrar.
Los tristes recuerdos anclados en el pasado.
Pero yo, tengo en el corazón a quien amar por siempre,
siempre tendré suficientes lágrimas para llorar,
aún quiero amar, aún quiero sufrir.
Si no puedo amar más, entonces prefiero morir.
Pero, yo, llevo en el corazón alguien a quien amar por siempre,
amar...amar...