El calor me empuja hasta ti,
buscando una tormenta solar,
no dirás que no te lo advertí, mmm...
Volverá a estallar la atracción que nos desarma y nos lleva
a la erupción de una tormenta solar.
Ya se puede ver la aurora de luz ultravioleta,
la explosión.
Brillando, un destello que nos deja cegados,
es el fuego que se va calentando
una alarma que me dice que hoy contigo
no estoy a salvo.
Cuando llega la señal del espacio,
como un rayo que nos deja cegados
la energía nos incendia, mi cuerpo alcanza
cien mil grados más.
Llamaradas que no sirven para nada.
¿Quién puede más?,
me rindo y te dejas quemar.
La emisión del electromagnetismo
es un desastre natural
combinado con romanticismo,
un fenómeno habitual
que nos arrastra hacia el abismo.
Brillando, un destello que nos deja cegados,
es el fuego que se va calentando
una alarma que me dice que hoy contigo
no estoy a salvo.
Cuando llega la señal del espacio,
como un rayo que nos deja cegados
la energía nos incendia, mi cuerpo arde
a cien mil grados.
Nunca imaginé
la fuerza que puedo desatar:
Fuegos capaces de mover
un campo magnético hacia ti.
Interferencias que al latir
perturban la electricidad.
Ya nada puede repeler
las ondas que chocan contra mí.
Una tormenta - solar perfecta.
Una tormenta - solar perfecta.
Una tormenta - solar perfecta.
Una tormenta - solar perfecta.
Una tormenta - solar perfecta.
Buscando una tormenta solar...
Una tormenta - solar perfecta.
Buscando una tormenta solar...
Una tormenta - solar perfecta.
Buscando una tormenta solar...
Una tormenta - solar perfecta.
Buscando una tormenta solar...