Tú y yo, nos entendemos así.
Tú y yo, eso no cambiará.
¡Ya verás!
Siempre somos tú y yo cuando ya nada funciona.
Tú y yo en todos los combates.
Lo creemos, tú eres mi mejor amiga.
Ambas hemos crecido
con nuestros pequeños secretos, nuestras penas,
los mismos problemas.
Fuimos hechas como todas las chicas.
Con confidencias hasta el infinito, linda,
hemos tenido montones de sueños para la vida.
Tú y yo, nos entendemos así.
Tú y yo, eso no cambiará.
¡Ya verás! Nos hemos seguido siempre.
Desde la escuela hasta el día de hoy,
incluso cuando hemos cambiado las páginas
de algunas nubes,
todo eso que nos habíamos prometido
jamás cayó en el olvido.
Nunca nos hemos abandonado, nunca traicionado.
Nada ha cambiado, nada se terminó.
Hemos compartido todo y las lágrimas,
y las risas, las ganas
y los lamentos, muchísimas cosas, oh sí.
Sin blanco no hay descanso.
La amistad siempre nos reúne.
E incluso en el fin del mundo,
a cada segundo,
sigue siendo así también.
Tú y yo, nos entendemos así.
Tú y yo, eso no cambiará.
¡Ya verás! Es como el día, ¡como la noche!
Es el destino que nos ata
al viento y a las turbulencias
de la adolescencia. Hemos mezclado nuestros gritos,
todas nuestras esperanzas y nuestros desafíos.
Iluminábamos el sol después de la lluvia.
Nada ha cambiado, nada se terminó.
Hemos compartido todo y las lágrimas,
y las risas, las ganas
y los lamentos, muchísimas cosas, oh sí.
Sin blanco no hay descanso.
La amistad siempre nos reúne.
E incluso en el fin del mundo,
a cada segundo,
sigue siendo así también.
Tú y yo, no lo olvidaremos.
Tú y yo, ¡nos acordaremos
de todo así! Nos acordaremos.