He madurado, ahora soy padre.
Todo ha cambiado pero sigo siendo el mismo de alguna manera.
Sabes que nunca le he tenido miedo a la muerte
pero ahora quiero ver las cosas que aún no ocurren.
Me sigue encantando alocarme, debería minimizarlo.
Todavía conozco a gente que no me agrada y que debería dejar.
Me avergüenzan las cosas que hice en mi juventud
pues ahora tengo una niña; sé que un día ella pasará por lo mismo.
Camiones de equipaje, paradas y aviones.
Llamadas a altas horas de la noche con la señal yendo y viniendo.
Sentirse con baja serotonina habiendo conocido mejores días.
Irse, irse, irse pero en cada momento que estás conmigo
El tiempo se detiene.
Cuando estás en mis brazos siempre lo hará
y la vida, la vida cambia de mareas.
Perdí la confianza en quien era
al estar tan ocupado en perseguir el cielo y mantener las cifras altas.
Tengo el mismo sueño todas las noches:
Una bala que atraviesa mi cerebro en cuanto cierro los ojos.
Todavía tengo que recargarme en un hombro cuando me quiebro
y tengo gente que depende de mí para ayudarlas.
A veces fantaseo con desaparecer sin dejar rastro.
No me lamento de nada pero desearía hacer las cosas de forma distinta.
Zona de vuelo raso, demandas y estrellas de cine.
El encabezado escribió la princesa y la cicatriz facial.
Huesos rotos, allanamientos y Babilonia.
Irse, irse, irse pero en cada momento que estás conmigo
El tiempo se detiene.
Cuando estás en mis brazos siempre lo hará
y la vida, la vida cambia de mareas.
El tiempo se detiene.
Cuando estás en mis brazos siempre lo hará
y la vida, la vida cambia de mareas.