Recordaré de todos modos, aunque no lo quieras.
Te desposaré porque nunca te lo he dicho.
Cómo lastima buscar, encontrarte poco después
y en la angustia de perderte, te tomaré una foto.
Te tomaré una foto.
Recordaré de todos modos y sé que no querrás.
Te llamaré porque aún así no contestarás.
Cómo hace reír ahora pensarte como un juego.
Y entiendo que te he perdido, te tomo otra foto.
Porque pequeña podrías marcharte de mis manos
y los días desde ya lejos desde antes serán años.
Y te olvidarás de mí.
Cuando llueve, los perfiles y las casas me recuerdan a ti.
Y será bellísimo
porque la alegría y el dolor tienen el mismo sabor contigo.
Yo quisiera solamente que la noche ahora velozmente se marchase.
Y que todo lo que tienes de mí, no regresara de golpe.
Y quiero amor y todas las atenciones que sabes dar.
Y quiero indiferencia si alguna vez quieres herirme.
Y reconocí tu mirada en la de un transeúnte
pero incluso teniéndote aquí, te sentiría distanta.
¿Qué puede significar sentirse pequeño
cuando eres el más grande sueño, la más grande pesadilla?
Somos hijos de mundos diversos, una sola memoria
que borra y disbuja distraída la misma historia.
Y te olvidarás de mí.
Cuando llueve, los perfiles y las casas me recuerdan a ti.
Y será bellísimo
porque la alegría y el dolor tienen el mismo sabor contigo.
Yo quisiera solamente que la noche ahora velozmente se marchase.
Y que todo lo que tienes de mí, no regresara de golpe.
Y quiero amor y todas las atenciones que sabes dar.
Y quiero indiferencia si alguna vez quieres herirme.
Ya no basta el recuerdo.
¡Ahora quiero tu regreso!
Y será bellísimo
porque la alegría y el dolor tienen el mismo sabor,
el mismo sabor contigo.
Yo quisiera solamente que la noche ahora velozmente se marchase.
Y que todo lo que tienes de mí, no regresara de golpe.
Y quiero amor y todas las atenciones que sabes dar.
Y quiero indiferencia si alguna vez quieres herirme.
Y quiero indiferencia si alguna vez quieres herirme.