Debe haber una razón para que las gotas de lluvia caigan.
Debe haber una razón por qué las montañas son altas
y por qué las estrellas están en el cielo
Debe haber una razón por qué.
Debe haber una razón para que los ríos fluyan,
para que hermosos árboles y flores crezcan,
y por qué los pájaros tienen alas para volar.
Debe haber una razón por qué.
Los cambios de estación a estación,
el alba que trae el nuevo día,
todas estas maravillas deben tener una razón,
esa fue la intención.
Debe haber una razón para enamorarse,
se ha debido concebir allá, en los cielos
y por qué estamos tan enamorados, tú y yo.
Debe haber una razón por qué.