Nacida en el año del OxyContin, (1)
criada en el césped alto,
una adolescente millonaria que tiene pesadillas de los flashes fotográficos.
Ahora estoy sola en una isla barrida por el viento,
atrapada en el divorcio complejo de las estaciones,
no atenderé el teléfono si es la disquera o la radio.
El brazo enyesado en la gala del museo,
un tenedor en el bolso para llevárselo a mi madre,
todas las supermodelos bailan en torno a la tumba del faraón.
Bien, si estás buscando una salvadora, no soy yo.
¿Necesitas que alguien cargue con tu dolor?
Bueno, esa no soy yo
porque todos estamos tristes y quebrados.
¿Dónde están los sueños que teníamos?
No puedo encontrarlos,
esperemos que el sol nos muestre el camino.