Tierra extranjera, ¡cuánta melancolía!
Cuando nos despedimos, no sé por qué
tú me mandaste un beso y escapaste
y sin embargo ahora, te lo confieso
no pienso en ti...
No le recuerdo más aquellos ojos bellos
llenos de una luz caliente e infinita...
me he olvidado de tus cabellos
y de la boquita que era mi vida
Pero sueño noche y día con mi casita
mi viejita que siempre espera...
el amor del país y de la madre
¡es una gran flama que quema el corazón!
¡Esta tristeza, esta nostalgia
son el recuerdo de la Italia mía!
Pero sueño noche y día con mi casita
mi viejita que siempre espera...
el amor del país* y de la madre
¡es una gran flama que quema el corazón!
Mamá, ¡yo moriré de nostalgia
si no vuelvo a verte a ti ...y a la Italia mía!