Llueve entre tú y los demás,
sé bien qué sientes metido en la misma guerra
todo el mundo busca un trocito de tierra
y nuestra casa es un trozo de tiempo,
sé bien qué sientes.
Eh! Si la noche te asusta ven aquí,
tengo un circo de canciones hasta el amanecer.
Eh! Cuando te llueva dentro ven a casa,
cierra los ojos si no ves el camino.
Las estrellas son faros en el horizonte,
yo siempre las he visto en tus ojos,
llevas dentro, inquieta y viva,
la llamada de los arrecifes
de una tierra lejana,
más allá de los sueños.
Cuando en la noche, desnudas y llenas de canciones,
vengan a buscarte desde el mar
las sirenas del viaje,
no lo dudes y emprende el vuelo,
aquí tienes mi deseo: ¡camina!
camina lejos,
camina como quien quiere saberlo todo,
camina hasta romperte,
camina.
Eh! Si la noche te asusta ven aquí,
tengo un circo de canciones hasta el amanecer.
Eh! Cuando te llueva dentro ven a casa,
cierra los ojos si no ves el camino
Que cuando estés lejos una canción te devuelva a casa,
que cuando se enamoren de ti no pretendan tenerte, sólo acompañarte,
que la vida no sea sólo una cama amable, un paseo dulce,
que las cosas que esperas no sean como esperas cuando las vivas,
que tengas la alegría de los días claros,
que por las mañanas te despierten sin precipicios,
que quieras mucho alguien sin que lo necesites,
y no dejes que las heridas se endurezcan en el corazón, que no reposen en el pozo del alma.
Recuerda, si llueve dentro de ti,
que caminar cura las heridas
que vivir, vivir no es estar vivos,
vivir es la actitud de llenar la vida,
la vida, eso que pasa cuando tú ríes.
Eh! Si la noche te asusta ven aquí,
tengo un circo de canciones hasta el amanecer.
Eh! Cuando te llueva dentro ven a casa,
cierra los ojos si no ves el camino.