Salí volando
cuando me vi dentro de un laberinto
sin decidir.
Huésped en mi propia casa
con sílabas de amor todas en el pavimento
como el polvo.
Mas llegas tú que hablas lentamente
y pides perdón por si nos parecemos.
Llegas tú, ¿de qué planeta?
Ojos serenos, alma complicada.
Un alma complicada.
Yo tan similar a ti
transformando el sonido de la rabia.
Yo tan similar a ti,
un beso en la frente y después en los labios.
La maravilla de ser similares.
La ternura de ser similares.
La protección entre seres similares.
Ya no me pregunto
si habrá alguien que tienda una red
lista para auxiliar.
Me lo recuerdas tú,
quien vuela aprende a fastidiar a sus caídas
así como a defenderlas.
Y así lo haces tú y lentamente escondes
la tos y el corazón en la misma mano.
Llegas tú que sabes quién soy.
Yo tan similar a ti
transformando el sonido de la rabia.
Yo tan similar a ti,
un beso en la frente y después en los labios.
La maravilla de ser similares.
La ternura de ser similares.
Llegas tú que haces pasar
el miedo de precipitarme.
Yo tan similar a ti,
libres y prisioneros de la misma jaula.
Yo tan similar a ti,
un beso en la frente y después en los labios.
La maravilla de ser similares.
La ternura de ser similares
La conmoción de ser similares.