Cuando ella pasa, parece fuegos artificiales.
En el cielo, es ella a quien percibo.
Su majestad solo es digna de un rey.
Y yo soy poco majestuoso.
Ella simplemente no me ve.
Cuando baila, entonces baila todo, sus caderas, sus brazos.
Todo se ilumina en la luz de esta dama.
Tiene la gracia y la pureza, que las otras no tienen.
Tiene todo, lo que yo no tenga.
Mientras más me acerco a ella, más torpe soy,
Mi cuerpo, mi voz, mi rostro.
Hay límites, que pese a millones de soldados, uno puede borrar,
Pero los nuestros no se pueden superar.
Él tiene estilo, es delicado, tiene gestos finos.
La vida fácil de este mundo es su tipo.
Él es mucho de lo que no puede ser.
Pero las mujeres no sabes de esas cosas, cuando él habla.
Uno puede cambiar tantas cosas, cuando se está dispuesto a pelear,
Pero no esta injusticia.