Alerta, que al que va en motocicleta ningun carro
lo respeta, ¿y autobús?, ¡mejor ni hablar!
Tranquilo, que cuando llegue la hora, si usted
no se descontrola, no nos lograrán prender.
Deje el nervio ya y concéntrese. Es muy tarde
para hecharse atrás. Se hace lo que se tiene que hacer
cuando ya no hay nada mas que hablar.
Recuerde, el color del auto es blanco, europeo y nuevecito,
y porta placa oficial. Son cinco, tres atrás, dos adelante;
nuestro hombre está en la foto que le acabo de enseñar.
Colóquese al lado del chofer y no piense en lo que va
a pasar. No tenemos tiempo que perder;
arranque al oirme disparar.
Hoy cambiará la vida.
Hoy cambiará su vida.
Hoy cambiará mi vida.
Yo no sé si el tipo es bueno, o malo; solo sé que le tocó
perder. En el cielo está Dios, soberano: y en la tierra,
la orden del cartel.
Espero que la ametralladora no vuelva a trabarse ahora,
como en el ensayo ayer.
Más tarde, después que cobre el trabajo lo invito
a tomarse un trago, no me vaya a despreciar.
Yo, por él, no siento compasión. Nunca en vida él hizo
algo por mí. Si es entre él y yo la selección,
no me dolerá verlo morir.
Hoy cambiará la vida.
Hoy cambiará tu vida.
Hoy cambiará mi vida.