Emily lo intenta pero la malinterpretan,
le gusta tomar prestado los sueños de los demás por un día.
No existe otro día,
probemos de otra manera
perderás la cabeza y jugaras
libremente por siempre.
Miren a Emily jugar.
Al caer la noche, Emily llora
mirando a los árboles con tristeza en completo silencio hasta mañana.
No existe otro día,
probemos de otra manera
perderás la cabeza y jugaras
libremente por siempre.
Miren a Emily jugar.
Ponte un vestido que llegue hasta el suelo
flota en un río por siempre y para siempre, Emily.
No existe otro día,
probemos de otra manera
perderás la cabeza y jugaras
libremente por siempre.
Miren a Emily jugar.