Se me fue con el sol
sin hablar, sin un adiós
no recuerdo ni su cara ni su voz.
Se me fue con timidez
con la luz del anochecer:
ahora sé que no le supe comprender.
Se me fue sin avisar,
no le pude acompañar
a su cita con la oscuridad.
Yo no sé si me extrañó,
si al final me perdonó,
sólo sé que ya no está.
Se me fue tan normal
una tarde, un día más
tan fugaz que no le pude perdonar.
Me miró, sonrió
¿cómo iba yo a saber
que tal vez su sonrisa era un adiós?
Se me fue tan natural
como el río al mar se va,
se me fue de aquí a la eternidad.
Yo no sé si me extrañó,
si al final me perdonó,
sólo sé que ya no está,
lo que es peor... No volverá.