La luna se vistió de gala,
la calle se llenó de calma
para seguir tus pasos
siempre tan leves y delicados.
La gente se para para verte,
tienes ese poder.
Son gestos
tan rápidos,
tan ágiles
que acallan
el resto de mí.
Será que necesito
que tú también sientas
las cosas que siento
intensamente.
Sólo falta un gesto
tan preciso
que hable en nombre del sí.
Son gestos
tan rápidos,
tan ágiles
que acallan
el resto de mí.
El ruido de tus pasos
resuena en el aire,
no voy jamás
a perderme de ti
y ni siquiera
a moverme de aquí.
Son gestos
tan rápidos,
tan ágiles
que acallan
el resto de mí.
Sólo falta un gesto
tan preciso
que hable en nombre del sí.
El resto de mí