Oh mi Dios, este... sí, la Estampida Ute, quiero decir, es una tradición, por supuesto, em. Un año deseamos... estaba lloviendo y estaban las estampidas y este caballo sale y todos decía, sabes, que se suponía era el mejor y se cayó en el fango y... quiero decir, debiste haberlo visto, su pata simplemente se quebró por completo; solo se quedó colgando ahí. Y la chica, sabes, se arrodilló... fue lo más triste; quiero decir, creo que la mayoría de la multitud estaba llorando. Se puso junto a él y se inclinó sobre el caballo y sólo lloró y lo abrazó y... pues sabía que eran sus últimos momentos con ese caballo.
Chica pueblerina con una sonrisa de Coca Cola y piel de madreselva
nacida bajo la señal pronta de una luna roja.
Chica pueblerina que está ahí para sus amigos, loca por The Bends.
Yo estuve ahí cuando guardó por primera vez sus cosas infantiles.
Teníamos la primavera en nuestros talones.
Éramos fuerzas inquebrantables, precipitándonos a lo desconocido
como caballos fugitivos y encabritados hasta el final.
Y cada paso es una plegaria plateada ante el fuerte viento.
Intercambiaron la escuela por anillos de boda y rentas.
Invitaciones enviadas sobre ti y él por un local a las afueras del pueblo.
Chica pueblerina, pusiste tus sueños en hielo y nunca lo pensaste dos veces.
Algunos seguramente los olvidarás y otros jamás lo harás.
Hubo una promesa en nuestro andar
pero cambiamos de rumbos, precipitándonos a lo desconocido
como caballos fugitivos y encabritados hasta el final.
Y cada paso es una plegaria plateada ante el fuerte viento.
Como caballos fugitivos, es un largo camino para volver a casa otra vez
cuando cada paso es una plegaria plateada ante el fuerte viento.