Tus ojos ya no me miran
Son tus labios dos mentiras
Tu lengua, insulto y caricia
Pero así me siento viva
Prefiero ser pura sangre
Y que me tires de las bridas
Que una muñeca de jade
Un adorno en tu vitrina
Por eso rómpeme, mátame
Pero no me ignores, no, mi vida
Prefiero que tú me mates que morirme cada día
Rómpeme, mátame
Pero no me ignores, no, mi vida
Prefiero que tú me mates que morirme cada día
Tus manos son dos cadenas
Mi placer y mi agonía
Con una me das cariño
Con la otra me dominas
Prefiero sentir la espuela que me hincas cada día
A ser la flor que en un vaso olvidaste en una esquina
Por eso rómpeme, mátame
Pero no me ignores, no, mi vida
Prefiero que tú me mates que morirme cada día
Rómpeme, mátame
Pero no me ignores, no, mi vida
Prefiero que tú me mates que morirme cada día
Rómpeme, mátame
Pero no me ignores, no, mi vida
Prefiero que tú me mates que morirme cada día
Rómpeme, mátame
Pero no me ignores, no, mi vida