¡Qué día hacía, amigos!
¡Qué día hacía, amigos!
La dulce Adela vino con el mapa de un nuevo lugar por
descubrir,
con las llaves de una moto que nos dejaba su vecino.
¡Qué día hacía, amigos!
Adela decía "estoy aquí para rodar entre la avena
y tocarnos fuerte en el molino, contando pájaros que emigran,
huyendo de un país gris".
¡Qué día hacía, amigos,
no habéis visto muchos así,
y Adela quería pasarlo conmigo!
Y me giré y le dije que sería divertido,
y me giré y le dije que bucólico y bonito,
y me giré y le dije "la próxima claro que vengo",
y me giré y le dije, y me giré y le dije:
¡Ahora no, no, no! ¡No me interrumpas!
¿no ves que estaba inspiradísimo escribiéndote una canción?
ja se aclaraban los contornos de un gran tema por folk
que congelará para siempre esto tan especial que hay entre
los dos,
que hay entre los dos...
¡Ahora no, no, no! ¡No me interrumpas!
¿no ves que estaba inspiradísimo escribiéndote una canción?
ahora que me quedaba un verso para rimar con tus cabellos,
ahora que casi se puede sentir el olor de tu piel en el papel,
en el papel...