Se me fue,
como ese río hacia el mar.
Se me fue,
buscando su libertad.
Se me fue,
y no consigo encontrarme su camino.
Se perdió,
como una estrella fugaz.
Se perdió,
como paloma torcaz.
Se perdió,
y aunque la quiero olvidar, no lo consigo.
Yo puse besos en los dedos de su alma
y calmé sus heridas
cuando el frío del mar
se le clavó en la piel.
Yo pinté la sonrisa de una niña bonita
en los labios dormidos
que besé.
Se marchó,
siguiendo su corazón.
Se marchó,
volando sin dirección.
Se marchó,
sin dejarme caricias ni mentiras.
Y, ¿quién soy yo?
Pregunta mi soledad.
¿Quién so yo?
Repite mi voluntad.
¿Quién soy yo,
sin la fuerza motriz que me dirige?
Yo puse besos en los dedos de su alma
y calmé sus heridas
cuando el frío del mar
se le clavó en la piel.
Yo pinté la sonrisa de una niña bonita
en los labios dormidos
que besé.
Y donde estés,
te mando felicidad.
Donde estés,
también tendrás mi amistad.
Donde estés,
te seguirá mi esperanza de tenerte.
Y, ¿quién soy yo?
Pregunta mi soledad.
¿Quién so yo?
Responde mi voluntad.
¿Quién soy yo,
sin la fuerza motriz que me dirige?
¿Quién soy yo...?