Quién cuando ya no aliente,
Silenciosamente llegará hasta ti,
Y como el oído ya te habrá vencido,
Le dirás querido al igual que a mí.
Quién borrará mis huellas,
Y encendiendo estrellas en la oscuridad,
Abrirá balcones, romperá crespones
Y pondrá canciones en tu soledad.
Quién será mi relevo,
Quién te va a convencer,
Quién volverá de nuevo
A reinar en tu ser.
Quien cuando ya me ausente,
Va cruzar el puente, que mandé cerrar,
Y pondrá colores en tus sinsabores,
Y te hará olvidar pronto mi pesar.
Yo tengo el doble de tu edad,
Más no me importa sucumbir,
A ver de cara la verdad del porvenir,
No vistas luto por mi amor,
Pues no me gusta ser cruel,
Y sé que nunca que ese color le fue a tu piel.
Quién, cuando yo me vaya,
Llegará a tu playa, un anochecer,
Y pondrá su empeño en velarte el sueño,
Y lo harás tu dueño casi sin querer.
Quién besará tu pelo y en tu negro duelo,
Te pondrá un clavel, y ya diferente,
Te verá la gente, nueva y sonriente,
Como un cascabel.
Quién viene a suplicarme,
Quién dime dulce bien,
Quién trata de borrarme,
Quién amor en tu sien.
Quién por sustituirme,
Y por destruirme sin contemplación,
Romperá en pedazos, todos nuestros lazos,
Y sin compasión, mi propio corazón.