Amanece día a día indiferente,
desayuna sin siquiera hablar,
y se marcha sin decir te quiero,
acelera sin mirar atrás.
Luego va muriendo el día y no me llama
y la espera se hace larga en soledad,
soledad que en mí se hace infinita
cuando llega y me doy cuenta que no está.
Quién diría,
este amor que era tan grande como el cielo,
quién diría,
este amor que siempre fue todo lo bueno,
quién diría,
este amor que yo juraba ser eterno
está enfermo
y no sé por cuanto tiempo va a durar.
(se repite desde el inicio)