Señor, ¿qué viste en mí?
esto yo no me lo explico
si no era sabio ni rico,
mejores había que yo.
Si solo fui un pecador,
enfermo y desesperado,
bebiendo todo el pecado de miseria y dolor.
Explícame tú también,
lo que yo cuento no importa,
dos veces cierro mi boca,
lo que vale es tu opinión.
Pero, ¿qué viste en mí, Señor?
Si tan solo me recuerdo como un perro callejero
sin hogar, también sin dueño,
¿qué viste en mí, Señor?
Señor, me has hecho tan feliz,
déjame que yo lo cuente
y sepa toda la gente
el cambio que hiciste en mí.
Tú me enseñaste a vivir,
soy el ave con espacio,
ya no voy rumba abajo
ya no soy la antes que fui.
Señor, por tu inmenso amor
perdonaste mi pecado
Y todito mi pasado
en lo profundo quedó
Pero, ¿qué viste en mí, Señor?
Si tan solo me recuerdo como un perro callejero
sin hogar, también sin dueño,
¿qué viste en mí, Señor?
¿Qué viste en mi?...