¿Por qué abandoné a mi madre
y sólita la dejé,
sin darme cuenta siquiera
si tenía que comer?.
Hasta que llegó una noche
en que muerta la soñé
hecho un loco, fui a buscarla
pero ya no la encontré.
Decían que mi pobre madre
sin saber ya lo que hacer
pedía de puerta en puerta,
que le dieran de comer.
Y en el rincón de una iglesia
muerta de frío tal vez
sin exhalar una queja
pasó toda su vejez.
[Hablado:]
Por qué somos los humanos así
después que sucede algo
nos damos cuenta, de lo que vale
la vida de un ser querido
como es nuestra madre.
Con una de las vecinas
me dejó escrito un papel
que borrado por el llanto
apenas pude leer.
«Hijo de mi alma" decía:
«sé bueno con tu mujer
que te quito de mi pena
que yo ya la perdoné.
Y si Dios te diera un hijo
háblale mucho de mí
dile que no te abandone
como tú me hiciste a mí.
Si tiene los ojos negros
y si se parece a ti
dale un beso que tu madre
le dejó antes de morir».