Placer superior... esa sensación
que recorre tu piel con calidez,
ese sentimiento que te lleva a
liberar toda tu imaginación.
Un auténtico toque que disipa
hasta los pensamientos turbulentos,
convierte las voces oscuras
en dulces palabras delicadas.
Se compara como un buen perfume
que despierta los recuerdos olvidados
y como una fresca brisa de verano
que refresca todos tu cuerpo.
Es capaz de abrir la mente y aflora
las ideas que no son mencionadas,
transforma los dolores en colores
y sacia los deseos con pasión.