¡Cha risunqui huamajnencka! (¡Allá te va la primera!)
Como yo te quiero vida,
nadie te puede querer.
Yo te quiero sin medida
y para vos viviré.
Y si no me estás creyendo,
ahora te demostraré:
¡costumbrecitas que tienes
a besos te arrancaré!
¡Allá va lo que falta!
Esta forma de quererte
nunca yo terminaré,
como una madre a su hija
mucho más te adoraré.
Ahora a tu mamá y tu tata
ya nomás te pediré.
Mi corazón con el tuyo
para siempre lo uniré.