Mientras que el amanecer se entreteje a través de las hojas de otoño,
Los pobres se acumulan bajo los árboles desnudos
Preguntandose cómo sobrevivir, pues el invierno ya llega,
Y el frío medieval se despierta de un sueño profundo.
Líbrame, Señor, de la muerte eterna ese terrible día.
Es el 14 de ciembre de 1503 cuando los de arriba abandonan su luto
Cuando llegó el seleccionado para prever.
¡Algo cambió sin advertencia!
Líbrame, Señor, de la muerte eterna ese terrible día.
Nació en tiempos del Dios cristiano
Un niño --o así dice la leyenda-- con el poder del Creador
Para ver lo que será, a oscuras, desconocido.
Y entonces, él, que será conocido como hereje, será quemado públicamente.
La mano que --agarrandose del aire-- sangra por la espina de la rosa
El instinto humano de la avaricia, castigado por la ira de Dios.
Él, espejo de vuestras almas, percibe el luto, la pena y el dolor.
Él, que porta este nombre: Michael de Notre Dame.