Los viejos cofres se van mostrando
como una grieta en la pared,
comienzan pequeño y crecen con el tiempo.
Y todos parecemos siempre necesitar ayuda
de alguien más
para reparar ese estante
con demasiados libros,
léeme tu línea preferida.
Papá se fue a otras tierras
y encontró a alguien que entiende
el tic-toc, y la necesidad de llorar del hombre occidental.
Él volvió el otro día, tú sabes,
algunas cosas en la vida pueden cambiar
y algunas otras
se quedan igual...
Como el tiempo, siempre hay tiempo
en mi cabeza.
Así que pasa de mí, estaré bien,
sólo dame tiempo.
Los viejos sentados en la valla
con sus gorros en las manos,
se ven muy bien,
observan su ciudad cambiar.
Los niños gritan, o eso parece,
más fuerte que antes
al aire libre, y dentro de tiendas con nombres más grandes.
Mamá intento lavarles la cara
pero estos niños perderían sus gracias,
y papi perdió muchas veces en las carreras.
Ella decayó el otro día, ya sabes,
algunas cosas en la vida pueden cambiar
pero algunas otras se quedan igual...
Como el tiempo, siempre hay tiempo
en mi cabeza.
Así que pasa de mí, estaré bien,
sólo dame tiempo.
Tiempo, siempre hay tiempo
en mi cabeza.
Pasa de mí, estaré bien,
sólo dame tiempo.