Aquellos ojitos verdes
con quién se andarán paseando,
ojalá que me recuerden
aunque sea de vez en cuando.
Dicen que cuando suspiran,
aquellos ojitos verdes,
que suspiran con la vida
porque todavía me quieren.
¡Ay, ay, ay, ay, donde andarán
esos ojitos que me hicieron suspirar!
¡Ay, ay, ay, ay, donde estarán
esos ojitos que no los puedo olvidar!
Vuela, vuela pajarillo,
pero si a mi vida vuelves
ha de ser con dos ojitos
pero tienen que ser verdes.
Cuando voy por esos campos
y me fijo en los laureles,
parece que estoy mirando
aquellos ojitos verdes.
¡Ay, ay, ay, ay, donde andarán
esos ojitos que me hicieron suspirar!
¡Ay, ay, ay, ay, donde estarán
esos ojitos que no los puedo olvidar!
Un corrido mejicano