En torno a ti la calle va. Se hace a un lado la ciudad.
Las casas bajas que se disipan y el aire cambia ya.
Huir ahora es tu idea, en medio de un cielo que se aleja
pero el dolor cuando aceleras corre más que tú.
En cada curva, en cada edad está siempre ahí que ya espera.
Elige a las personas frágiles, nunca a las débiles.
Así en tus pensamientos
el resto ya no cuenta.
La noche, lo sabes, no vale un adiós
que la vida es reencontrarse amigo mío.
Tu dolor se queda ahí, te hurga el alma y así
decides detenerte un momento para pensarlo un poco.
Él pone en fila tus días oscuros, tus derrotas, tus fracasos
pero te rebelas y para defenderte sólo te tienes a ti.
Así en tus pensamientos
el resto ya no cuenta.
La noche, lo sabes, no vale un adiós
porque el alba vuelve siempre a su sitio
y la vida es reencontrarse amigo mío.
Que la vida es reencontrarse amigo mío.
Ahora el tiempo sigue al tiempo
y tú tienes una cita.
No puedes llegar tarde.
Tu vida te espera ya.
Así en tus pensamientos
el resto ya no cuenta.
La noche, si quieres, es un sueño o una idea.
No es más que una breve galería
entre el pasado y todo lo que harás.
Sabes que el alba vuelve siempre a su sitio
y la vida es reencontrarse amigo mío.