No sé qué decirte, amor mío.
Te siento extraña y algo triste.
Luego en el telefóno así
pareces distante, todavía más... todavía más.
Sobre tus palabras amargas
ya no hay miel para untar.
Luego lo demasiado dulce, ya sabes,
termina pronto por cansar.
En este momento no lo sé,
no sé qué decirte más de lo que,
que tú ya sabes.
Nosotros que somos nómadas de amor
perdidos en los desiertos de la ciudad,
almas suspendidas entre las ganas de soñar
y la cotidiana realidad.
Nosotros que tenemos siempre en mente un oasis
y una noche por pasar ahí,
somos lo que nunca cambiarán.
Tú ya sabes que esta es la verdad.
No sé qué decirte ahora yo
si pides estar sola un rato.
Como tú quieras, pero en mi corazón
presiento que ya no te volveré a ver.
En este momento no lo sé,
no sé qué decirte más de lo que,
que tú ya sabes.
Nosotros que somos nómadas de amor,
viajeros expertos en neblinas,
nunca estaremos aquí detenidos esperando,
pero seguimos el viento, sus rastros.
Nosotros que tenemos siempre en mente un oasis
y una noche por pasar ahí,
somos lo que nunca cambiarán.
Esta es la verdad.
Nosotros que tenemos siempre en mente un oasis,
cualquier otro sitio, ya sabes,
no nos puede bastar jamás... ya lo sabes.