Háblame, nunca me hablas a mi.
Oh, parece que puedo hablar.
Puedo oír mi voz gritando.
Pero no hay respuesta en absoluto.
Mírame, nunca me miras a mi.
Oh, he estado sentado tanto tiempo clavando mis ojos,
pero estás mirando a través de mi
como si yo no estuviera aquí en absoluto.
No hay respuesta. No hay respuesta en absoluto.
Baila conmigo, nunca bailas conmigo.
Oh, parece que puedo moverme,
estoy cerca de ti, lo más cerca que puedo acercarme.
Pero sin embargo, no hay respuesta en absoluto.
No hay respuesta en absoluto.
Tengo la sensación de que tratas de decirme una cosita.
¿Hay algo que debo saber?
¿Qué excusa estás tratando de decirme? 1
¿Debo entender: párate o vete?
No lo sé.
Quédate conmigo. Parece que nunca estás aquí conmigo.
Oh, traté de ponerme ahí,
oh, pero está fuera de mi alcance.
Y no hay respuesta en absoluto.
No hay respuesta en absoluto.
Tengo la sensación de que tratas de decirme una cosita.
¿Hay algo que debo saber?
¿Qué excusa estás tratando de decirme?
¿Debo entender: párate o vete?
No lo sé.
Tal vez tan dentro de mí
trate de que no haya nadie más que yo.
Soy demasiado terco para decir: “Esto se acabó conmigo,
no es el que estás buscando”.
Pero tal vez dentro de mí esté mintiendo
a nadie más que a mí.
Oh, pero estoy muy irritado. Estoy de guardia
y no tengo ninguna escapatoria.
Escúchame, nunca me escuchas a mí,
oh, y parece que no hay ninguna salida.
He estado tratando pero no podemos conectarnos.
Y no hay respuesta en absoluto.
No hay respuesta en absoluto.
No hay respuesta en absoluto.
Ninguna respuesta en absoluto.
¿Hay alguien que me escucha?
Oh, no hay respuesta en absoluto…
1. Literalmente: “ de venderme”.