Navidad en Jerusalén
Cerca de un muro que se creyó perdido
Un hombre arrodillado está allí
Llorando a mi lado
Y mira hacia arriba, agradeciendo al cielo.
Navidad en Jerusalén
Descalzos a las puertas de las mezquitas
Miles de personas vienen
A dedicar sus oraciones
De cara al piso hasta el anochecer.
Esas manos que rezan aquí al mismo tiempo
No todas tienen el mismo fervor
Los hombres también han olvidado
Que Dios es quién hace latir sus corazones.
Navidad en Jerusalén
También es el niño de Belén
Y el peregrino guiado por la estrella de la mañana
Buscando la casa de su nacimiento.
Navidad en Jerusalén
Es el mundo a los pies del eterno
Que vienen a implorar su nombre
Y a pedir perdón
De haberse apartado de los caminos del cielo.
Sin embargo, bastaría ver un día
Elevar una plegaria
El corazón de tres hombres hambrientos de amor
Para cambiar la faz de la tierra.
Navidad en Jerusalén
Cerca de un muro que se ha encontrado
Un hombre de rodillas me dijo:
Todo cambió en mi vida
Porque Jerusalén está de nuevo en la tierra.
La primer ciudad sagrada
A quién el Señor dijo:
Haré aquí mi más maravillosa Navidad
En Jerusalén.