El viento que se levanta,
el mar que se agita,
el sol cuando llueve
eso eres para mí.
Más fría que la luna,
más blanca que la nieve,
más triste que la fiebre;
pero ¿por qué?
Nadie puede saber,
nadie,
por qué me haces sufrir
nadie,
Quién está abrazado a ti
está sólo,
solo tu perfume
duele.
Y para romper este hechizo
me voy para olvidarte,
pero si vienes a decirme:
"¡Quédate!"
corro hacia ti para besar
esas manos.
Y para romper este hechizo
me voy para olvidarte,
pero si vienes a decirme:
"¡Quédate!"
corro hacia ti para besar
esas manos.