[NACH SCRATCH] Bobby Lo y yo, hoy a.k.a. Roy Orand,
hoy nos aclaman hoy nos imploran.
[Verso 1: Nach Scratch]
Ni rendición, ni huida, ni fuga,
la aventura de rimar y demostrar la vida como una arruga,
haré rap de culto como Roots Manuva,
haré rap oculto, rap adulto sin ninguna duda,
la oscura búsqueda de pasta os convierte en gente oscura,
marionetas de feria creen que viven la locura,
mis historias de odio y sus palabras de amor,
mi vida en blanco y negro y sus días de color,
hoy mi jerga no es hardcore para que escuches mejor,
mi rap es rencor para sordos, mi rap es mi olor,
no viene de Mordor pero es aún peor,
es rap destructor, es rap señor, es ganador,
ellos ponen mi rap junto a Nas y tú short,
ellas llevan mi rap y Cristian Dior,
mi rap es mi honor, mi rap es el vuelo del Cóndor,
contra tu invasión, ni retirada, ni rendición.
[Estribillo: Jefe de la M & Nach Scratch]
Al son de la maldición, de tanta presión, difícil decisión es encontrar la dirección,
¿qué pasa cuándo el corazón, se queda en su prisión?
Cuándo la consciencia pierde la razón, y hay que bailar al son,
de la maldición, de tanta presión, como hallar motivación y encontrar la inspiración,
¿qué pasa cuándo no hay perdón?
Solo luchas sin compasión, ni retirada, ni rendición.
[JEFE DE LA M] Yo, Bobby Lo, ah, NS, Málaga City, A-L-I, Doble M saga, La Colonia Warrior, cúshalo, yo, yo.
[Verso 2: Jefe de la M]
Por mucha mierda que nos echen no nos van a lograr detener,
son malas rachas que tardan en pasar, ahora es la hora de crecer,
pensar en merecer, en lo que hay que esconder, miedos y dudas hacer desaparecer,
mi amigo Nacho sabe de lo que hablo,
es sufrir por hacer lo que amamos,
y demostrar grandeza al levantarnos,
saber que quieren engañarnos, malvados planes tramamos,
y Jefe al igual que Nach estuvimos atados
a un infierno que pareció eterno,
la llama del valor nunca apaguemos,
demostremos que somos fieros,
que a la gente que amamos tenemos en consideración,
que las lágrimas que perdemos no sean de perdición
sino en pos de una purificación,
tras la agresión, llega la rebelión,
luego la redención, invasión, victoria, celebración,
no hay rendición si estamos vivos,
prepárate Jefe tiene ya listo el plan definitivo,
siempre tengo en cuenta a aquellos que me respetan,
me cuido de trepas y traidores que quieren guerra,
mi consciencia sigue limpia y procuro mejorar,
días de lucha por el respeto ya quedaron atrás,
sudor, amor, acción, mi carta de presentación,
Málaga y A-L-I, el destino nos unió,
ya están las pruebas demuestra hermandad, de nuestra unión,
no importa la situación, ni retirada, ni rendición.
[Estribillo: Jefe de la M & Nach Scratch]
Al son de la maldición, de tanta presión, difícil decisión es encontrar la dirección,
¿qué pasa cuándo el corazón, se queda en su prisión?
Cuándo la consciencia pierde la razón, y hay que bailar al son,
de la maldición, de tanta presión, como hallar motivación y encontrar la inspiración,
¿qué pasa cuándo no hay perdón?
Solo luchas sin compasión, ni retirada, ni rendición.
[Verso 3: Nach Scratch]
¿Qué tienes? ¿Quién es tu padrino?
Mantienes bajo llave tus bienes, controlas tu propio destino,
tan dañino como un cáncer, en constancia avance,
infinito alcance por mucha mierda que lancen,
no conseguirán librarme del placer,
¿qué coño puedo hacer si rimar es lo único que yo se hacer?
Así lo hago y si no te trago es porque eres vago,
sobre tu mierda chico vengo a hacer estragos,
¿aún creés que en esto me puedes vencer?
Si solo estás en bachiller no juegues con el canciller,
si el no saber te hace enloquecer, puedes creerlo,
ese problema no vale la pena resolverlo,
soy amo del dinero y no su siervo, del verbo señor y dueño
y que le follen al mañana, ya nada me quita el sueño,
mi padre me enseñó a saber perder,
a ver, que todos son amigos hasta que llega el alquiler,
por eso tengo prestigio, me llaman hijo prodigio,
Einstein del rap que la ciudad tomó refugio, eligió,
y hoy las palabras quieren salir solas,
rimas tan poderosas que a veces no las controlas,
y así continuaré siempre fiel a lo que piense,
desde el día de mi parto hasta que visite al forense,
entra el dragón, ni retirada, ni rendición.
[Estribillo: Jefe de la M & Nach Scratch]
Al son de la maldición, de tanta presión, difícil decisión es encontrar la dirección,
¿qué pasa cuándo el corazón, se queda en su prisión?
Cuándo la consciencia pierde la razón, y hay que bailar al son,
de la maldición, de tanta presión, como hallar motivación y encontrar la inspiración,
¿qué pasa cuándo no hay perdón?
Solo luchas sin compasión, ni retirada, ni rendición.