Nómadas que buscan los ángulos de la tranquilidad
En las nieblas del norte, en los tumultos civilizados
Entre los claros oscuros y la monotonía de los días que pasan
Caminante que vas buscando la paz en el crepúsculo
La encontrarás,
la encontrarás al final de tu camino
Largo el tránsito de la aparente dualidad
La lluvia de Septiembre despierta el vacío de mi cuarto
Y los lamentos de la soledad aún se prolongan
Como un extranjero no siento ataduras del sentimiento
Y me iré de la ciudad,
esperando un nuevo despertar
Los viajantes van en busca de hospitalidad
En pueblos soleados, en los bajos fondos de la inmensidad
Y después duermen sobre las almohadas de la tierra
Forastero que buscas la dimensión insondable
La encontrarás fuera de la ciudad,
al final de tu camino