Era una vez una niña
que llamaban Isabel;
de tanto andar por la viña
le pusieron Moscatel.
Moscatel,
labios de sangre como un clavel.
Moscatel,
sonrisa alegre de cascabel.
Al campo, niña, no vayas sola
que el viento acecha tu delantal,
y está mal visto que una amapola
ande de noche por el parral.
Moscatel, moscatelito,
de azúcar, canela y miel;
del mundo lo más bonito
son tus ojitos de moscatel.
Tus ojitos, tus ojitos,
¡ay, tus ojitos de moscatel!
Diego pasó por la viña
y al mirar a Moscatel,
enloqueció por la niña
y también ella por él.
Moscatel,
verde aceituna tienes la piel.
Moscatel,
verde los ojos como el laurel.
Frente a la playa de Chipiona,
blanca más blanca que un palomar,
tengo una casa pa' tu persona
y una corona blanca de azahar.
Moscatel, moscatelita
ay, de azúcar, canela y miel;
tus ojos, niña bonita,
son dos uvitas de moscatel.
Dos uvitas, dos uvitas,
¡ay, dos uvitas de moscatel!
Frente a la playa de Chipiona,
blanca más blanca que un palomar,
tengo una casa pa' tu persona
y una corona blanca de azahar.
Moscatel, moscatelita
ay, de azúcar, canela y miel;
tus ojos, niña bonita,
son dos uvitas de moscatel.
Dos uvitas, dos uvitas,
¡ay, dos uvitas de moscatel!
Dos uvitas, dos uvitas,
¡ay, dos uvitas de moscatel!
Dos uvitas, dos uvitas,
¡ay, dos uvitas de moscatel!