Cada sábado vengo aquí.
La atmósfera es la de siempre
pero mi cabeza está en otro lado
y pienso de nuevo en aquella tarde allá.
Devastado por sus ojos.
Con una excusa me acercaste.
Podría olvidarme del nombre
pero de su cuerpo encima jamás.
No sé quién es ni a dónde va
pero este es el encanto que tiene.
No sé quién es ni a dónde va
pero envidio su libertad.
Habíamos bailado y
le hablé algo bien de mí,
que tengo una historia complicada.
Ella me contó poquísimo de ella.
No sé siquiera dónde está
(Dónde está...)
pero de ella conozco cada geografía.
La mano cálida que me toca
y su boca apoyada sobre la mía.
No sé quién es ni a dónde va
pero este es el encanto que tiene.
No sé quién es ni a dónde va
pero envidio su libertad.
Sé que es locura,
que pensarla no la hace mía
pero me gusta la idea.
Yo la buscaré donde sea que esté.
No sé quién es ni a dónde va
pero este es el encanto que tiene.
No sé quién es ni a dónde va
pero envidio su libertad.
No sé quién es ni a dónde va
pero este es el encanto que tiene.
No sé quién es ni a dónde va.
Quisiera llamarla libertad.