Un viajero solitario perdió su camino.
El tiempo perdió las zonas horarias.
El corazón se ha agotado por el huso de los vicios.
En una parte remota ella lo está esperando:
Pura, nunca fue tocada con las manos sucias -
Una chica, su corazón no dejaba pasar al mal por la puerta.
Las serpientes le mentían al viajero que no sería feliz con ella,
Pero él creía obstinadamente que encontrará la paz en sus ojos.
Otra vez un nuevo amanecer interrumpirá el sueño.
Las piernas continuarán caminando nuevamente, sin prestar atención al dolor.
Un reflejo del sol brillará en el cielo dejando una pista,
Para ayudarme a encontrarte...
Otra vez un nuevo amanecer interrumpirá el sueño.
Las piernas continuarán caminando nuevamente, sin prestar atención al dolor.
Para sentir el calor de tus manos -
Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Un viajero solitario perdió su camino.
Al parecer la meta suya aún está tan lejos.
El mal tiempo mece un barco en su mente,
Pero el péndulo en el alma le mostrará a él las orillas.
Intentando hacer que todos sus esfuerzas sean en vano -
La vida los separó por diferentes polos.
Sus destinos fueron atados por las leyes silenciosas,
Pero él está creyendo obstinadamente que encontrará la paz en sus ojos.
Otra vez un nuevo amanecer interrumpirá el sueño.
Las piernas continuarán caminando nuevamente, sin prestar atención al dolor.
Un reflejo del sol brillará en el cielo dejando una pista,
Para ayudarme a encontrarte...
Otra vez un nuevo amanecer interrumpirá el sueño.
Las piernas continuarán caminando nuevamente, sin prestar atención al dolor.
Para sentir el calor de tus manos -
Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.
Quiero encontrarte, Medina. Quiero encontrarte, Medina.