Eres una promesa vacía.
Eres una silla fácil.
Eres la fuerza de los dioses
que ha golpeado en algún lugar.
Eres un secreto descubierto.
Eres un cielo misterioso.
Eres un deseo flotando
hacia la noche.
Medellia de mis ojos,
eres el vacío mío,
eres la razón por la que escribo.
Y si dices que lo harás,
te seguiré amando.
Y si pudiera
desecharía este mundo,
te revestiría de perlas,
te daría lo que quisieras.
Eres todo lo que veo
en una habitación concurrida.
Tus motivos vacíos,
impasibles, revelados.
Medellia de mis ojos,
Eres el vacío mío,
Eres la razón por la que conduzco.
Y si dices que lo harás,
te seguiré amando.
Y si tan sólo pudiera
ser cualquier cosa por ti,
ser quien sea,
cualquier cosa importante, desgastada.
Eres las tontas razones
en la risa de un pez dorado.
Eres las estaciones eternas
que descansan, al fin.